Turismo responsable y animales de carga
Como agencia de viajes no invasiva y responsable, al organizar y acompañar viajes por Marruecos, somos conscientes de la influencia que tenemos en las prácticas con animales que existen en este país que habitamos, y por eso, nos parece imprescindible reflexionar sobre el origen, las causas y las consecuencias de las mismas.
Nos gustaría comenzar este artículo expresando nuestro máximo amor y respeto por los diferentes valles del Altas, lugar donde tenemos la suerte de vivir y echar raíces. Somos conscientes de que en el Marruecos rural la ausencia de trabajos bien remunerados, la inexistencia de servicios médicos adecuados para la población local y la ausencia de servicios de transporte continuado de una aldea a otra, hace que las personas que viven en los diferentes pueblos y comarcas tengan que ingeniárselas para lograr sus medios e ingresos económicos para sus familias. Y es ahí donde en muchas ocasiones, aparecen las mulas de trabajo en las montañas del Atlas. Desde que una mula sea el vehículo para moverse entre diferentes Valle, y por ende, vaya cargada de todo lo necesario para el viaje, hasta que una mula sea la que acompañe una ruta de montaña de varios días. Es por eso que, en la mayoría de ocasiones, se les trata muy bien a esos animales que son un miembro más de la familia, un miembro que aporta a su manera al bienestar de la comunidad.
Sin embargo, si relacionamos esta situación con el turismo que, cada vez más a menudo vemos en Marruecos, un turismo masivo y superficial que, parece que otorga al turista la libertad de llegar hasta donde quiera y sobre todo, como quiera, vemos necesario hablar sobre cómo debemos y tenemos que tratar y/o trabajar con estos animales.
Nuestra familia, nosotros, nuestro equipo, vivimos en la montaña, y hay viajes en los que nos adentramos en comunidades nómadas que viven entre valles cercanos a nuestro hogar, en el valle de Tassaout, en los que nos acompañan mulas. El cuidado y respeto que tenemos y practicamos por los animales es inmenso, asegurándonos de su bienestar en toda la ruta. Es por eso que nos parece imprescindible tener esta premisa clara en todas las rutas que requieren de estos animales y sobre todo, reflexionar desde dónde están trabajando estas mulas en la ruta.
Mulas de carga en la subida al TOUBKAL, el pico más alto del norte de África
Pudimos reunirnos con María Fernández de Arróyabe, experta en el tratado de équidos (especie de animales a la que pertenecen las mulas, caballos y burros). Ella, con su experiencia tanto en el trabajo de campo, como en toda la parte administrativa junto con las asociaciones que cuidan del bienestar de estos animales, apunta:
“Más allá del bienestar animal, hay también una cuestión de autenticidad y de mérito personal. Realizar una ruta o alcanzar una cima no es solo un destino, es un recorrido que pone a prueba nuestra preparación física y mental. Cuando afrontamos esta experiencia valorando únicamente “haber llegado” y no el esfuerzo invertido, perdemos parte de su verdadero significado. Delegar ese esfuerzo en animales de carga, o incluso en personas locales que transporten nuestro equipo, reduce el mérito de la hazaña y nos aleja de su esencia. En cierto modo, es una forma de hacer trampa: nos apropiamos del logro sin asumir plenamente el camino que conlleva. Y si no somos capaces de hacerlo por nuestros propios medios, quizá deberíamos cuestionarnos si merecemos vivir esa experiencia.
Si no podemos asegurar el bienestar de los animales implicados, o si no estamos dispuestos a hacer el esfuerzo de informarnos y actuar en consecuencia, deberíamos reflexionar si estamos realmente preparados, y si merecemos realizar esa actividad. Nuestra responsabilidad ética nos acompaña a cualquier lugar al que vayamos: no se queda exclusivamente en el lugar donde vivimos, y debemos recordar que no, no tenemos derecho a todo.
Para aquellas personas viajeras que quieran informarse y planificar sus viajes con consciencia, aportamos aquí referencias fiables en cuanto a bienestar de los équidos. Es importante tener en cuenta que, en la mayoría de los países con recursos económicos más limitados, los animales de carga suelen ser burros y mulas. Uno de los mayores referentes en cuanto a bienestar de estos animales, y quienes más conocimiento generan sobre sus necesidades y las condiciones que deben cumplirse para garantizarlo, es la asociación The Donkey Sanctuary. En su página web se puede encontrar una gran cantidad de información y recursos, además de contar con personal que puede atender y asesorar en las dudas que surjan. En España, su sede se llama El Refugio del Burrito, entidad a la que también se puede recurrir en caso de tener cualquier consulta o necesidad. Asimismo, en marzo de 2025, Eurogroup for Animals ha publicado el Libro Blanco de Bienestar para los Équidos (versión en español), que ofrece unas bases sólidas y consensuadas sobre el bienestar de estos animales de carga”.
Expedición Titrit agradece de corazón a María su tiempo en poder compartir con nosotros su sabiduría sobre un tema que es imprescindible como agencia de turismo no invasivo y responsable. ¡Te esperamos pronto de nuevo en Marruecos! Shukram, tanemirt, gracias.
María
Fernández de Arroyabe
